Es una enfermedad la cual causa un intenso dolor la cual se caracteriza por una erección sostenida por lo cual el pene y sus cuerpos cavernosos no retornan a su estado flácido por un largo tiempo esto puede durar más de 3 o 4 horas, contrario a lo que se piensa esta sensación está lejos de ser placentera ya que esto requiere atención medica ya que podría tener terribles consecuencias.
No es indispensable un estímulo sexual para que el órgano masculino alcance su erección para lograr una penetración en las relaciones sexuales ya que esto puede deberse a problemas de salud como por ejemplo desordenes en la medula espinal, leucemia o inflamación de la uretra.
El priapismo debe tratarse a tiempo ya que puede convertirse en una disfunción eréctil, en una erección normal las venas que irrigan el pene se van llenando paulatinamente de sangre y la retienen, lo cual lo mantiene firme. Poco a poco este vital liquido regresa a su velocidad normal de circulación y por esto el órgano masculino recobra su estado habitual, cuando se tiene priapismo no sucede esto ya que la erección dura por varias horas.
Esta es una enfermedad poco común, pero se han ido incrementando durante los últimos años afectando de manera más significativa los individuos de raza blanca siendo más frecuente que se presente entre los 20 y 50 años ya que. No obstante, entre los 20 y 25 son de mayor incidencia ya que es donde se presenta el máximo consumo de drogas ya que esto es una de las causas de su origen.
Entre otros factores que la propician esta los trastornos en la sangre, como los coágulos en la medula espinal o los cuerpos cavernosos, así como tumores en la pelvis o en la columna vertebral, o por infecciones avanzadas en los genitales, cuando estas lesiones son tratadas el priapismo también desaparecerá.
El diagnóstico del priapismo se hace mediante un examen clínico en el cual se analiza el estado físico detallado del afectado al igual que los antecedentes de la ingesta de medicamentos los cuales hayan podido propiciarla, como pueden ser los antidepresivos, los ansiolíticos y algunos depresivos, es muy común que pueda presentarse en personas que consumen regularmente marihuana y cocaína.
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